Sabemos por experiencia propia que en muchos edificios donde funcionan call centers no se garantizan las medidas mínimas de seguridad (salidas de emergencia con accesos liberados, luz de emergencia funcional, un sistema de señalización claro, escaleras y ascensores en condiciones, mantenimiento de techos, paredes y suelos, correcto tendido eléctrico, ubicación y cantidad de matafuegos, Brigada de Emergencia - personal capacitado para actuar y dirigir una situación de crisis, botiquines completos con todos los suministros necesarios, realización de 2 simulacros anuales por ley del gobierno de la Ciudad y declarados en una planilla oficial, etc).
Las condiciones de higiene y seguridad en el trabajo no sólo hacen referencia a los objetos e instalaciones materiales, sino también a las capacitaciones de prevención y de cuidado de la salud ante accidentes y enfermedades profesionales. Las patronales no nos protegen contra accidentes, pero tampoco nos protegen contra las enfermedades propias de la actividad que realizamos como teleoperadores. Ésta es la razón por la que presionan con lobbys para que la ley del teleoperador no sea aprobada, porque desnudaría el carácter insalubre de nuestra tarea.
En cuestiones específicas de nuestra tarea podríamos precisar que:
- En todos los establecimientos, ningún trabajador podrá estar expuesto a una dosis de nivel sonoro continuo equivalente superior a los 85 dB (decibeles). De acuerdo a los especialistas "siempre se debe considerar la posibilida de reducir el tiempo de exposición así como la vigilancia médica"
- La medición del ruido se lleva a cabo con un instrumento llamado decibelímetro. Dicha medición debería ser efectuada de forma regular en todos los espacios donde los teleoperadores desarrollan su tarea.
- Para contra-arrestar el efecto, se puede insonorizar techos e instalar mamparas aislantes, además de proveer al trabajador con auriculares adecuados y en condiciones.
- A nivel más general, podemos detallar que las empresas deben realizar tres controles de carácter OBLIGATORIO: el examen preocupacional, los examenes periódicos y el examen de egreso. De estos tres, aquellos que las empresas más evaden son los periódicos. Si bien son abonados por la ART, los exámenes periódicos son desconocidos para muchos trabajadores. Todas las empresas deben hacer un relevamiento de los riesgos incurridos por los empleados antes del 1° de Abril de cada año. Este relevamiento se realiza en una planilla que la empresa debe entregar a la ART. En caso de que no presenten ningún trabajador para dicho estudio, deben declarar en un escrito formal que "El personal no se encuentra expuesto a ningún agente de riesgo". Esta medida engañosa, que desnuda la complicidad de las ART con las empresas, les permite evadir las audiometrías que deberían realizar anualmente y que permitirían detectar y evitar que un trabajador pierda su capacidad auditiva por culpa de esta tarea. Aún más, la empresa tiene la obligación legal de reubicar al trabajador cuando se detecta que su salud se ve afectada y son debidamente notificados por los resultados de la ART.
- Este es sólo un ejemplo de las posibles consecuencias sobre la salud de los teleoperadores. Respecto de un estudio reciente de la Asociación de Medicina del Estrés de Córdoba, el Dr Cólica define el síndrome de burn out: “Es un síndrome de lo que se denomina cabeza quemada. En algunas profesiones relacionadas con la salud o la docencia esto se manifiesta entre los 5 y 15 años de trabajo ininterrumpido. Los chicos que trabajan de operadores de call center ya tienen el síndrome de cabeza quemada en solo dos años”
El profesional describe las múltiples dolencias que se han estudiado en las personas que desarrollan tareas telefónicas: fuerte desgaste emocional, jaqueca y agotamiento, cambios de humor, ansiedad, alteraciones del sueño, problemas gastrointestinales, contracturas musculares en cuello y espalda, alteraciones hormonales de diverso tipo y, por ende, propensión a las infecciones por una baja en el nivel de anticuerpos y del sistema de defensas. ¿A qué se debe todo esto? En palabras del Dr Cólica: “Estos problemas tienen que ver con el tipo de trabajo que realizan, con la sobreexplotación a la que son sometidos. Probablemente, se podría realizar en una tercera parte de lo que se está haciendo para que no afecte de esta forma. El trabajo de los operadores de call center lleva a la utilización en exceso de vías neurológicas, auditivas y visuales, todo el sistema de memoria y el sistema de control de las funciones cognitivas que dependen del lóbulo frontal. Todo eso se altera por la sobre exigencia a que son sometidos con 120 llamados todos los días durante seis horas y entonces comienzan a agotar sus sistemas”
Compartimos la fuente de esta excelente entrevista http://amecordoba.blogspot.com.ar/2011/03/call-center-se-esta-destruyendo-la.html?m=1
Para ubicar estadísticamente el nivel de impacto que tiene la falta de condiciones en todos los lugares de trabajo (no sólo en los call centers) citamos el fragmento de un ensayo de especialistas en seguridad e higiene:
“Según un informe de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo, el ente oficial que regula la operatoria de las ART, en Argentina sólo el 3% de las empresas cumple con todas las especificaciones en materia de prevención y seguridad ocupacional”
Es una tarea importante a corto plazo: poner en pie comisiones que señalen la complicidad de la burocracia de los sindicatos y de las mismas ART con las patronales, que investiguen la falta de inversión en seguridad y pongan al desnudo las razones detrás de ello.
Como ya hemos señalado, las empresas operan con este nivel de impunidad debido a la complicidad de la dirección del SEC y del Ministerio de Trabajo (coimas a inspectores, etc.). Llamamos a formar comisiones de reclamo y comisiones de seguridad e higiene, integradas por los trabajadores, para controlar que se cumplan con todas las condiciones necesarias para el desarrollo de nuestra tarea y para que nuestra salud no sea la moneda de cambio de las ganancias capitalistas.
sábado, 18 de agosto de 2012
miércoles, 1 de agosto de 2012
LA
INSEGURIDAD Y LA INSALUBRIDAD EN LOS LUGARES DE TRABAJO
En los meses que
han pasado del 2012, los trabajadores ya hemos visto lo que causan las empresas
con su gerenciamiento, con su búsqueda de nuevas formas de rebajar costos y de aumentar
sus ganancias. Hemos vivido con dolor la masacre de Once, de amplia repercusión
en los medios, que entre sus 50 víctimas fatales contó a, por lo menos, tres
empleados de calls.
El 8 de mayo pasado
hubo una explosión en Kadicard, call center de Córdoba, luego de la cual
falleció un compañero, en tanto que otro aún tiene heridas graves y permanece
hospitalizado. La patronal intentó callar esto ante los medios, haciendo pasar
una masacre laboral como un accidente infortuno. Amenazaron a los trabajadores
para que no hablaran con la prensa y los presionaron para que acudieran a
trabajar al día siguiente, aun cuando las condiciones mínimas de seguridad no
estaban garantizadas. Casi la mitad de su personal se encuentra hoy con
licencia psiquiátrica. La catástrofe no se repitió en Sprayette de Buenos Aires
por pura casualidad: también se incendió recientemente, y también la empresa se
esmeró por ocultar el hecho y mantener la “normalidad”.
Atento Córdoba fue
clausurado en mayo por la municipalidad debido a que el lugar no reunía
condiciones elementales de seguridad. A pesar de esto, se descubrió que la
empresa sostuvo la continuación de las tareas en el mismo edificio, poniendo en
peligro a todos los empleados que desarrollaban tareas allí. En otros calls no
se respetan cuestiones elementales de higiene. En el comedor de Covedisa, por
ejemplo, hay cucarachas.
En resumen:
trabajamos en verdaderas covachas. Las empresas operan con este nivel de
impunidad debido a la complicidad de la dirección del SEC y del Ministerio de
Trabajo (coimas a inspectores, etc.). Llamamos a formar comisiones de reclamo y
comisiones de seguridad e higiene, integradas por los trabajadores, para
controlar que se cumplan con todas las condiciones necesarias para el desarrollo
de nuestra tarea y para que nuestra salud no sea la moneda de cambio de las
ganancias capitalistas.
¡APROBACION
YA DE LA LEY DEL TELEOPERADOR Y EL PLUS DEL 100%!
El 27/7 se cumplió
un año de la media sanción que dio el Senado al proyecto de Ley del
Teleoperador. Dicho proyecto continúa dormido en Diputados debido a la presión
en su contra de la Cámara de Call Centers y de la AmCham, quienes extorsionaron
con miles de despidos y cierres en caso de que la norma resultara aprobada. El
proyecto de ley establece la jornada máxima de seis horas; un mínimo de 15
segundos de descanso entre llamadas; cortes de 15 minutos por cada dos horas
trabajadas; y la declaración de insalubridad de la tarea, debiéndose pagar al
trabajador un salario de jornada completa (el punto más resistido por las
empresas).
Una de las aristas
del proyecto de la Ley del Teleoperador, el pago al 100% de los fines de semana
(sábados desde las 13hs), ha sido retomado en otro proyecto de ley que acaba de
ser aprobado por el Senado de la Nación y la comisión de legislación del
trabajo de Diputados. Aún le falta pasar por el pleno.
Reclamamos una
fuerte movilización de los sindicatos para derrotar el lobby empresario y
lograr la aprobación definitiva y cumplimiento de las dos leyes.
CRECEN LOS JUICIOS DE REINSTALACION
Las empresas de
call centers se caracterizan por su desprecio y ataque a la organización
gremial de los trabajadores. Los procesos de organización dentro de cada call
center siempre son en un principio sigilosos, debido a la persecución
empresaria y la connivencia patronal con la dirección del SEC y el Ministerio
de Trabajo. Con esta precaución, son muchos los lugares de trabajo que han
logrado organizarse en los últimos años y conquistar delegados que defienden a
sus compañeros, logrando mejoras en las condiciones de trabajo.
En otros casos las
empresas han logrado triunfos provisorios, procediendo (bajo cualquier excusa)
al despido de los que se organizan. Sin embargo, muchos de esos trabajadores
han iniciado juicios de reinstalación contra las empresas, debido al carácter
discriminatorio y antisindical de los despidos. Así, por ejemplo, un trabajador
de Teleperformance ha logrado recientemente un fallo favorable que ordena su
reinstalación en el puesto de trabajo, dado que quedó probada la acción
antisindical de la empresa. En Actionline, varios trabajadores lograron su
reinstalación. En Claro se encuentra en juicio una activista, y lo mismo ocurre
con los despedidos de Atento Balcarce, represaliados por organizar su edificio.
Estos juicios (que
no deben sustituir la movilización y otras medidas de lucha) pueden potenciar
los alcances de una agitación sobre el lugar de trabajo que se pretende
organizar, que es lo que las patronales intentan impedir por medio del despido,
y presentan la perspectiva de un retorno al lugar de trabajo, para organizarlo
abiertamente con la autoridad de haber derrotado a la empresa.
UNA NUEVA ETAPA
El 27 de junio, más
de 50 mil trabajadores participamos de la movilización a Plaza de Mayo por el
aumento del mínimo no imponible y en defensa de las asignaciones familiares. Bajo
el gobierno “nacional y popular” de los Kirchner, el 50% de los trabajadores se
encuentra en negro o padece la tercerización laboral. Los pocos trabajadores
que se arriman a una canasta familiar tienen que pagar impuesto a las ganancias,
debido a la falta de actualización por inflación de la tabla que calcula su
pago. Así, a partir de los 7800 pesos (5700 en caso de los solteros) se empieza
a abonar. La falta de actualización es un problema también en el caso de las
asignaciones familiares. En comercio se está cobrando el mínimo, y en algunos
gremios ya ni siquiera se cobra.
Contra lo que dice
Cavalieri en la revista Todos, el
número creciente de trabajadores que paga impuesto a las ganancias no es el
resultado de paritarias exitosas (los “aumentos” que gestiona la burocracia
siempre están por debajo de la inflación), sino de una política consciente de
confiscación salarial que está al servicio del pago de la deuda externa. Pero
hay algo peor: Cavalieri se negó a movilizarse el 27/6. Esto obedece a su alineamiento
con el gobierno nacional, como quedó en evidencia en su reciente reunión con la
presidenta.
Más allá del carácter
burocrático del moyanismo y de su acercamiento a Scioli e incluso a Macri (o de
su alianza de ocho años con el kirchnerismo), las reivindicaciones de la
movilización eran justas y ofrecían la oportunidad de plantear nuestras propias
reivindicaciones en el corazón del poder político. La participación de grandes columnas del Seoca
y del Secla en la marcha, además de la presencia de un importante activismo de
call centers y mercados de la Capital demuestran, dentro de nuestro gremio, una
disposición más general de los trabajadores a luchar, a pesar del inmovilismo
de los Cavalieri, Lescano, y compañía. La marcha del 27 abrió una nueva etapa
para el movimiento obrero, que puja por emanciparse de la burocracia y del
Estado. Llamamos a todos los luchadores a desarrollar una fuerza combativa y
antiburocrática en el gremio.
MARIANO FERREYRA: PRESENTE
LA VOZ
DE LOS CALL CENTERS
Boletín
de la agrupación Telemarketers en Lucha. Año 2, número 11. Agosto de 2012.
MARIANO FERREYRA: PRESENTE
El 6 de agosto comienza
en los tribunales de Comodoro Py el juicio por el crimen de Mariano Ferreyra y
las graves heridas sufridas por Elsa Rodríguez y otros compañeros. Los hechos
ocurrieron el 20 de octubre de 2010, cuando una patota de la burocracia de la
Unión Ferroviaria (reclutada con la complicidad de la Ugofe y que contó con una
zona liberada por parte de la policía) actuó bajo las órdenes de José Pedraza con
el propósito criminal de aleccionar a los tercerizados del Ferrocarril Roca,
que luchaban por el pase a planta permanente.
La sostenida
movilización popular desarrollada desde el día del crimen nos ha permitido
llegar al juicio con muchos de sus responsables tras las rejas. Pero la
burocracia de la Unión Ferroviaria sigue operando para lograr su impunidad: se
acaba de alinear en la CGT oficialista con ese propósito, y difunde afiches en
que dice estar con el “proyecto nacional”. La esposa de Pedraza forma parte del
directorio del Belgrano Cargas y Antonio Luna continúa como subsecretario de
transporte ferroviario, incluso después de la masacre de Once. Llamamos a mantener
la movilización y a un alerta máxima sobre este punto.
El juicio por el
crimen de Mariano pondrá en evidencia un entramado mafioso entre la Secretaría
de Transporte, las concesionarias del ferrocarril y la burocracia sindical, que
dejó en ruinas el sistema ferroviario y se enriqueció con decenas de miles de
millones de pesos de subsidios y pago al 50% a miles de sus obreros.
Para la juventud y
para todos los trabajadores de los call centers, la lucha por justicia para
Mariano reviste una importancia especial. En primer lugar, porque en nuestros
lugares de trabajo impera el negociado de la tercerización, por el que somos
encuadrados fraudulentamente en comercio y recibimos menos del 50% del sueldo
que nos corresponde por nuestras tareas. En segundo lugar, porque este
negociado se hace posible gracias a la burocracia sindical del SEC, que por
medio de la desorganización y hasta la intimidación convalida esta realidad.
Por último, por la complicidad de los gobiernos provinciales y del gobierno
nacional, que le otorgan todo tipo de subsidios y les permiten línea directa
con el Ministerio de Trabajo.
La condena de todos
los responsables no sólo será justicia para Mariano, sino también un gran
avance en la lucha contra la precarización laboral, la burocracia sindical y sus
patotas, y por el cese de cualquier tipo de hostigamiento contra los militantes
populares.
¡Perpetua a
Pedraza!
¡Basta de patotas,
burocracia sindical y tercerización laboral!
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